viernes, 14 de septiembre de 2007

Amor, Amar

Amor le dice, a eso que sentimos a veces. Amor le dicen, pero no saben de verdad lo que es. Se dice que es sólo querer a alguien, decir te quiero de vez en cuando, y dar regalos al mes. Pero, ¿de verdad eso es amor? Yo creo que no.

Amor es algo más fuerte y profundo, sin límites ni fronteras. Sin reglas ni complicaciones. Solo con libertad, y fluidez. Con querer y confianza. Que llega inundando tu corazón sin ni siqueira avisar. Porque uno nunca previene cuando se va a enamorar. Si al pasear por un campo sintiendo el olor de las flores, al estar saboreando un delicioso helado de vainilla en la heladería de la esquina, al bailar en la fiesta del edificio, al caminar en la urbanización de tu amiga, o simplemente en el salón de clase llegue sin darnos cuenta.

Lo importante es saber identificar ese amor. No dejarse engañar por aquellos que no son honestos. Sabemos muy bien qué es amar, porque lo podemos sentir. Lo sentimos al sonrojarnos, lo sentimos al sonreir, al abrazar con gran fuerza a alguien, lo sentimos al temblar sutilmente al estar al lado de ese ser. Lo sientes al rozar su suave piel, al ver que la mirada es correspondida, al no poderte sacar del pensamiento esa conversación, esa mirada o esa cara y sentir una tormenta de emociones dentro de nuestro pecho cada vez que lo recordamos.

Al hablar y sentir como si lazos de seda nos amarran y fuéramos unos solo, y al sentir sus labios en los nuestros en un beso inesperado, como si fuera una energía feroz y tierna a la vez. Eso se podría definir como amor. Pero el problema es, que no tiene definición alguna. No existe diccionario ni enciclopedia que nos pueda dar una definición exacta de algo inexpicable y mágico.

Sólo lo saben aquellos que alguna vez han podido amar. Aquellos venturosos, son los que vemos siempre por las calles. Una imágen cotidiana, de dos seres agarrados de las manos, hablando en leves susurros que solo pueden ser escuchados por uno oídos. Caminando sin un lugar a donde ir, solo con la seguridad de que están juntos y que ese instante es mágico y único, aunque lo hallan vivido muchas veces antes. Sintiendo la lluvia helada correr por sus mejillas, o sintienedo el calor que el sol da a sus cuerpos. Pero protegiéndo uno a otro, sin impotar que es lo que pasa o pasará, solo con la certeza de que su amor crece cada vez que se miran, cada vez que se hablan, cada vez que se escuchan, cada vez, sin importar estar lejos o cerca, piensan en ellos, y sonríen sin saber el porqué.
El amar es el milagro más grande que alguien pueda sentir alguna vez en sus vidas. Por eso no debemos nunca desperdiciar una oportunidad de amar. Si esa persona va a ser el gran amor de nuestras vidas; si no es así, sabemos que esa experiencia va a ser maravillosa en inigualable. Una aventura que nos dejará grandes enseñanzas para vivir. Y nos preparará para próximos amores. Puesto que siempre, el amor es algo que nos dará felicidad, alegría, querer, y por supuesto, la vida misma.

Prosa escrita en el 2004.

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