domingo, 23 de marzo de 2008

Un mundo en total equilibro: El Quijote (I)

   El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha y el Ingenioso Caballero Don Quijote de la Mancha. Clásico universal, escrito por el español Miguel de Cervantes Saavedra. Dos tomos donde el humor, la realidad y la ficción se fusionan para formar esa obra que tanto renombre tiene a nivel mundial. Pero, ¿Por qué es tan importante? ¿Qué aspectos tiene esta novela que es considerada como el “primer libro moderno”? ¿No es, como muchos estudiados afirman, una simple burla hacia las novelas de caballería? Solamente leyendo entre líneas se pueden encontrar las respuestas a estas interrogantes.

  Para comenzar, debemos entender realmente al Quijote. Muchos lo definen como una obra literaria en el cual un hombre mayor, apasionado por las novelas de caballería, intenta vivir como un caballero andante, acompañado por su fiel escudero, Sancho Panza. Se encuentra con muchas aventuras en su camino, y la más resaltante es la de los molinos, donde se evidencia claramente la locura del protagonista. ¿Esto es realmente Don Quijote de la Mancha? ¿Por esto es un clásico universal? Personalmente creo que no.

  Es una lástima que actualmente esta sea la información más difundida de la obra. Un simple y escaso vistazo a la superficie de la novela. Entre tantos aspectos que la hace realmente un ejemplo a seguir, como los géneros literarios inmersos en la misma, el humor, la libertad, la amistad o la vida del autor, el tema de la ficción será el tratado en esta breve reflexión.

  La novela de Cervantes nos muestra mejor que nada la esencia misma de la literatura. El arte de escribir, de dibujar, de cantar, de bailar, se basan en lo mismo, en un equilibrio entre la ficción y la realidad. Una constante disputa entre ellos. Esto ocurre porque el autor, basándose en la realidad, ficcioniza la misma.

  En este caso, Don Quijote representa fielmente la ficción, mientras que la mano de ese “encantador” escondido (Cervantes) representa la realidad en la obra. Aunque no nos damos cuenta, esta confrontación se encuentra en toda la literatura de una manera u otra. Pero siempre en busca de un equilibrio.

  Pero Cervantes va más allá de un simple “ficcionar la realidad”, trata de demostrar lo absurdo que puede resultar la ficción en relación a lo real. Ese era su principal objetivo, una crítica directa hacia las novelas de caballería, pero que lamentablemente (o no) no le funcionó como él esperaba...

No hay comentarios.: